martes, 20 de mayo de 2014
martes, 13 de mayo de 2014
La mamá del siglo XXI
Preludio
Los tiempos
modernos, han exigido que la mujer desempeñe también un nuevo papel dentro de
la sociedad, la mujer en el campo laboral. Como todo, ha traído muchas
ventajas, pues es grato ver ahora mujeres en puestos directivos, desempeñándose
en oficios o profesiones que antiguamente estaban reservadas para varones o las
puedes ver estudiando una maestría, especialidad, un curso de actualización e incluso hay quienes
están concluyendo sus estudios básicos.
La emancipación
de la mujer, la equidad de género, la igualdad como ciudadana, los derechos
humanos y reproductivos, han sido logros muy importantes que ha tenido la
sociedad. Las mujeres se han visto con mayores beneficios y su condición, está mejorando, no con la velocidad que
quisiéramos, pero ahí va.
Pero no todo es
miel sobre hojuelas, puesto que la mujer del siglo XXI además de insertarse al
campo laboral, tiene que seguir realizando el papel que culturalmente venía
desempeñando desde hace ya algún tiempo; y este papel es el de mamá.
Despegue
En la práctica,
me he encontrado con muchas problemáticas que viven las mamás de estos tiempos.
Las mamás de
este siglo están preocupadas porque pasan poco tiempo con sus hijos, tienen
trabajos que las están absorbiendo y no solo en su tiempo, sino que también en
su energía, por lo que llegan cansadas del trabajo a casa, para encontrarse que
tienen que seguir haciendo labores del hogar y para cuando terminan, están tan
cansadas que no tienen ánimo de platicar con los hijos, de escucharlos, de
pasar algo de tiempo con ellos.
Otra
problemática es que las mamás están totalmente “perdidas” en como entablar una
comunicación con sus hijos; trabajen o no trabajen las mamás, no saben como
acercarse a las hijas, son unas perfectas desconocidas y no saben mutuamente
que quieren, cuáles son sus planes, sus metas o proyectos. No logran poder
dialogar porque siempre alguien termina enojado y se acabó la plática.
Por lo que
muchas, temerosas de lo que pueda pasar con sus hijos e hijas, han optado por ser condescendiente –pasantona, me lo dijo hace poco una
madre de familia- a las peticiones de
sus hijos, por lo cual, siempre están compensando su ausencia o sus fallas con
celulares, ropa, múltiples permisos, etc. Como si estuvieran viviendo con una
culpa muy grande por salirse de casa para
ir a trabajar, por no estar en la escuela como antiguamente cumplían con este
papel.
Las mamás tienen
un gran reto, pues les ha tocado vivir una época totalmente diferente a las que
ellas vivieron, no quiero ser obvio con esto, pero los cambios que viven las
actuales generaciones son tremendos. Hay un exceso
de presente, con el uso de internet y las redes sociales. Hay acceso a
muchísima información al alcance de todos, pero no hemos desarrollado aún la
capacidad para discernir, clasificar y procesar esta gran cantidad de
información. Es por eso que las mamás actuales, tienen el gran reto de subirse al tren, de la vida moderna. Ya
no lo podemos parar, avanza a pasos
agigantados, los niños, las adolescentes, van desarrollando nuevas habilidades,
nuevas capacidades, nuevas necesidades o necedades
– en el peor de los casos-
Las mamás de
esta época, de esta generación, tienen que eliminar cualquier sentimiento de
culpa y tener bien claro que si están allá afuera trabajando, luchando,
gastando sus fuerzas, no es en vano, hay que completar el gasto de la casa y en
otros casos, lo tienen que hacer porque son la cabeza de su familia y está sola
haciendo frente a la responsabilidad de llevar sustento al hogar y cuidar y
educar a los hijos.
Aplica te
La mujer, la
madre, tiene que reconocer su valor ahora como proveedora, como educadora, como apoyo
fundamental en la familia, desde económico, hasta emocional. No debe ni tiene
porque sentirse débil, o poco valorada, puesto que está librando una batalla
con una actitud muy admirable, puesto que mientras la mujer salió de casa para
trabajar, los hombres no hemos querido entrar a casa para apoyar en las labores
domésticas, espero que si a ellas, les llevó muchos años adquirir este derecho
y reconocimiento, no suceda lo mismo con nosotros los varones para entrar al
quite en los quehaceres del hogar, incluyendo obviamente, la educación y apoyo
emocional de los hijos.
Mamá, deja de
sentirte culpable por no estar el tiempo
suficiente con tus hijos, reconoce este esfuerzo que estás haciendo en pro
del hogar, de la familia, de ti misma. Nadie nació enseñado y así como tú
tuviste que salir a trabajar, tienes derecho a equivocarte, a fallar, y si los
hijos no siguen tus consejos, tus recomendaciones y tu educación, ¡calma, no te
preocupes! Recuerda que nadie experimenta en cabeza ajena.
A la madre de mi
hija, a mi madre y a sus madres, mi felicitación, admiración y respeto para todas
por estar realizando este papel tan
loable y extra demandante. Sinceramente, ¡Felicidades!
jueves, 1 de mayo de 2014
El reto de ser niño hoy.
Preludio
Después de haber salido de la
cámara de reflexiones, con este artículo, retomamos trabajos con toda fuerza y
vigor.
Despegue
En esta ocasión,
quiero reflexionar sobre el reto que es ser niño en este momento de la vida.
Analizando la situación histórica que nos está tocando vivir es por demás
interesante, demasiada competencia, una vida vertiginosa, consumista, llena de
información a todas horas, por todos lados
y por lo tanto, tener una mayor capacidad para procesar esta información
la cual nos llega a las televisiones, a nuestros lugares de trabajo, en
nuestras familias, a nuestro celular inteligente.
Despertar,
desayunar, ir al trabajo, dar el máximo, regresa a casa, atiende a los hijos,
las deudas, los planes, tanto familiares como personales, capacitaciones –por tu
cuenta o de las que te mandan en el trabajo- dar el máximo, ser el mejor
empleado, que innova, que crea, que se mide con estándares que ni a veces el
mismo empleado entiende, la actitud proactiva; o el negocio propio, a veces se
vende otras no, la competencia de las mercancías importadas, de baja calidad
pero más económicas, la nueva reforma hacendaria implica que uses computadora
para expedir facturas, ¿computadora? ¡Pero si lo último que toque fue una
máquina eléctrica de escribir! Como adulto y como padre o madre, te toca no
sólo librar la batalla contra tu depresión, mal humor, la poca tolerancia a la
frustración o las decepciones. También tienes que apoyar a que tus hijos sepan
hacerles frente a estas batallas y otras, como el bullyng, aunque en tu caso te
toca vivir el mobbing, el uso y abuso
de drogas, alcohol y tabaco, las redes sociales y su necesidad de tener un buen
uso de ellas. Te toca también apoyar a tus hijos en su seguridad, estar alertas en el transporte público,
aunque también los tienes que enseñar a subirse al coche, poner el seguro, ir
viendo a todos lados, no para disfrutar del panorama, sino para estar alerta
ante cualquier situación de peligro. Llegar a la escuela, estudiar, sacar
buenas notas, aprender además de los conocimientos básicos técnicos y
científicos, hay que aprender a manejar
mejor la computadora, un idioma extra, si se pueden dos, mejor. Llegar a casa,
ayudar en los quehaceres propios del hogar, bueno, algunos están exentos de
esto. Mejor ven tv, o se abstraen al grado de pasar desapercibidos por estar
revisando su teléfono celular, si, ese teléfono inteligente que costo miles de
pesos, ese que parecía un aparato inofensivo y hoy se convirtió en un arma poderosa,
sirve para filmar y denunciar algún tipo de abuso, o para tomarse fotos, mismas
que aparecerán publicadas y en ocasiones mal usadas. La tarea escolar, ¿para
qué? No ayuda, se baja de internet, el profesor si se da cuenta no dice nada y
en el peor de los casos, ni sabe que es un plagio de otro trabajo, ¿actividades
al aire libre? ¡No creo! ¿Con esta inseguridad? ¿Con la alta contaminación?
Además no hay un parque cerca, ya lo quitaron para poner una tienda de
conveniencia, y el que hay está lejos y se juntan más adultos a drogarse que a
ejercitarse. Y por si fuera poco ¿quién lleva a los hijos al parque? Ambos
papás están cansados, hay cosas pendientes en la casa y alguno de ellos se
trajo algo de trabajo, para avanzarle y seguir dentro de la aceptación de los
jefes. Mientras, la comida, la ropa, la limpieza de la casa, como buen adulto
responsable de su salud física y mental, medio hace algo de ejercicio en casa,
con el aparato caro y estorboso, después los recomendadísimos 15 minutos de lectura, leer, te hace
crecer, dice la campaña que nos bombardea por todos los flancos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)